sábado, 1 de octubre de 2011

Capitulo 1: Der Mond Satans

Capitulo 1

26 de Septiembre 1998

-Oye Douglas, el jefe a replegado las fuerzas otra vez… no entiendo que quiere lograr… sabe que somos muy pocos y aun así nos quito los refuerzos para mantenerlos en un sitio alejado hasta que llegue el momento del contra golpe. Debería haber considerado mejor la situación, solos 7 oficiales no podremos resguardas las vías y la torre del reloj…- El oficial McCartney, a pesar de ser medio día no se sentía para nada tranquilo el olor a muerte era algo que no se podía ignorar, en la comisaria las cosas no estaban mejor, sabemos por los informes radiales que la comisaria está sufriendo un fuerte ataque por parte de los no muertos… - me niego a pensar que realmente sean zombis… parece un burla cruel…- A pesar de eso el jefe no quiso enviar a las fuerzas especiales de contra golpe a la comisaria, seguramente si los enviara podrían repeler el ataque… aun faltan unas 3 horas para que lleguen los primeros refuerzos de la corporación Umbrella, ruego a Dios porque lleguen pronto, ya no soportamos más esta situación…

-Debes calmarte un poco McCartney, no podemos hacer nada por los compañeros en la comisaria, nosotros tenemos un deber al igual que ellos.- Decía Douglas, al ver a su compañero sentado en el asiento delantero de la patrulla al centro de la barricada que se había dispuesto en medio de la carretera, sin embargo ni Douglas, ni McCartney podían dejar de prestar atención a los llamados de auxilio proveniente de la estación que estaba bajo ataque, no solamente habían oficiales en aquella institución, también habían muchos civiles los cuales había aparecido buscando lo que ellos esperaban seria un lugar seguro…

¡BANG! El sonido de una de las Browning`s Hp de sus compañeros los alerto y todos los 7 oficiales en la barricada.

-¿Que ha sucedido Max?- Dijo Douglas el Sargento de la unidad y encargado de la defensa de la barricada en el camino hacia St. Michael, su compañero guardo la pistola de nueve milímetros en su funda y bajo de las cajas que habían posicionado los policías a las orillas de las vías del tren como obstáculo a los muertos vivientes, aquellas cosas podrían ser aterradoras y muy fuertes, pero eso no les quitaba lo torpes al intentar cruzar un obstáculo.

-Creó que el calor del medio día ha hecho que esas cosas empiecen a acercarse por el almuerzo Sargento…- Max había hecho una broma para nada risible a sus compañeros. Pero parecía tener razón, ya se habían aparecido 3 de esas cosas en frente de la barricada, y aparentemente Max le había dado en la cabeza al cuarto. En la barricada se habían sellado todas las entradas que estuvieran alrededor y atrás de de donde se habían colocado los obstáculos de tal manera que no fueran sorprendidos por atrás, si los zombis venían tendrían que pasar por la sección donde se conectaban la línea central de Raccoon con la línea de Raccoon a Stone Ville, aquello les daría suficiente tiempo para reaccionar.

-No debes preocuparte Max… es muy probable que la mayoría de esas cosas estén en la comisaria y que por el momento no tengamos mucha acción, sin embargo debemos tener cuidado ya que no son solamente los zombis que deambulan la por la ciudad, ahí reportes de que otras creaturas han atacado a los civiles y oficiales en los últimos días. Así que estén atentos ante cualquier cosa extraña- Todos los 6 oficiales que escucharon al Sargento Douglas respondieron afirmativamente atendiendo a sus inquietudes, pero a pesar de eso sabían que si se llegara a desatar un verdadero ataque no podrían acabar con los zombis, mucho menos con su reducido arsenal. Todos los oficiales tenían solamente sus Browning`s Hp, tres escopetas Remington M1100-P que estaban en las patrullas y solamente un arma automática, el rifle de asalto M16 que de casualidad no estaba en el cuarto de artillería del cual se había perdido el control y hasta el momento no se había recuperado, esa es la misma razón de que tuvieran una munición muy escasa. El equipo solamente contaba con unas 5 cajas de munición para las 7 nueve milímetros, cada una de esas cajas tenía unas 50 balas, tenían 30 tiros para las 3 escopetas y únicamente dos rondas más para la M16 que cargaba McCartney, una situación demasiado desesperadora.

Dos horas habían pasado sin mucha novedad, pero en el constante repliegue de pequeñas hordas de zombis las municiones comenzaban a hacer sentir su escases. Solamente una hora más la el arribo de las fuerzas de Umbrella, seguramente las fuerzas de Umbrella y las fuerzas de contra golpe lograrían retomar la ciudad de una vez y al fin acabar con esas creaturas. La hora pactada había llegado…

El sol comenzaba a bajar y la temperatura bajaba al acercarse la noche, pero por alguna extraña razón se sentía una incómoda tranquilidad, todos los miembros del equipo se sentían observados. Pero preferían no pensar en ello, en vez de eso escuchaban los constantes reportes sobre la lucha en la comisaria la cual parecía irse perdiendo… de repente la transmisión se corto y el sargento Douglas intento reconectar la transmisión, sin embargo mientras intentaba recobrar el enlace McCartney aviso de una figura que se aproximaba desde la central de Raccoon. El Sargento Douglas se levanto de la patrulla y pudo ver una enorme figura que venía acercándose con pasos muy pesados hacia ellos, pero aquel enorme hombre venía siguiendo a una joven, era alguien familiar era la novata de los STARS quien se acerco a ellos y les dijo…

-Huyan! Esa cosa es indestructible- Dijo la joven. La mujer estaba aterrada, pero los oficiales no podrían abandonar a una compañera en apuros.

-No te preocupes, nosotros nos ocuparemos- Los oficiales tomaron posición en la barricada y esperaron a que el enorme monstruo estuviera a distancia de tiro…

- ¿¡Donde carajos están todos!?- Pregunto el comandante de las fuerzas que la corporación Umbrella había enviado a Raccoon City como un primer grupo de apoyo táctico a las fuerzas policiales de la ciudad antes del contra golpe del día 27 de septiembre. Como si respondiera a su llamada apareció un policía herido que salió de detrás de una de las camionetas de transporte de oficiales, quien les dijo: -Escapen! Aún están a tiempo, él se ha ido… pero no sé cuando durara en volver!- El comandante se acerco y le pregunto mientras sujetaba del hombro al oficial herido para que el sujeto no se cayera. – Hablas de los zombis?- cuando menciono a los zombis todos los miembros de los diferentes grupos a excepción de los más veteranos, los otros comandantes y capitanes, entrecruzaron la mirada muy confundidos.

-No… no estoy hablando de simples zombis- Dijo el mal herido sargento Douglas, fue algo aun peor, una enorme creatura que seguía a una chica… un miembro de los STARS… ¡ella lo guio a nosotros y nos condeno a todos!- Luego de decir eso Douglas desfalleciente les mostro al comandante y a los miembros del UBSC que no estaba solos, ya que aquel monstruo había llegado para terminar su trabajo.

Un rugido terrible fue lanzado por aquel enorme hombre de gabardina negra antes de saltar y caer encima de algunos miembros del UBCS, una cortina de polvo se levanto alrededor del ser mientras todos los demás miembros no tomaban conciencia de lo que sucedía. Al bajar la espesa cortina de polvo aquella creatura volvió a gritar mientras levantaba su brazo con furia, pero esta vez dijo algo…

-¡¡STARS!!!- después de decir aquello, el enorme hombre se movió tan veloz mente que parecía no corresponder su velocidad a la pesadez que aparentaba, de un segundo a otro se encontraba de frente a otro de los miembros del UBCS y de un golpe lo lanzo contra una de las patrullas que los policías tenían posicionadas en la barricada. Florr no podía creer lo que veía, era irreal, estaba demasiado impresionada como para decir o hacer cualquier cosa y la mayoría de sus compañeros tenían la misma actitud que Florr ante el repentino ataque.

-¡Ataquen! ¡¡Ataquen destruyan esa cosa!!- Ordeno el comandante, pero al recibir las órdenes muchos de los novatos y algunos de los veteranos no hicieron más que correr. Flavia levanto su M4A1 y abrió fuego automático directo al monstruo. Pero, como si no sintiera mayor molestia el monstruo simplemente se dio vuelta en dirección a Flavia, algunos de los compañeros de Flavia levantaron sus armas hacia la creatura y abrieron fuego. El comandante por su parte retrocedió un poco y al ver como sus camaradas uian entro en un estado errático de furia, por lo que levanto su arma contra aquellos que escapaban y abrió fuego. – ¡Cobardes! ¡Malditos cobardes como se atreven a traicionar a la corporación!- Al ver la desesperante situación algunos más decidieron huir. Florr por su parte estaba demasiado confundida, no sabía qué hacer, pero Flavia se acerco a ella rápidamente, Flavia golpeo con la culata de su rifle el abdomen de Florr no demacrado fuerte para dejarla fuera de combate pero lo suficientemente fuerte para hacerla entrar en razón.

-¡Florr reacciona! Te necesito aquí conmigo, ¡ayuda de una buena vez!- Florr se sorprendió ante el ataque de su compañera, pero sabía que tenía razón, debía ayudar era el momento de probar su entrenamiento. Levantando su rifle, Florr abrió fuego en contra de la creatura, pero esta tal y como paso con anterioridad no se molesto ni en dirigir siquiera un gesto de inconformidad producto de los ataques que recibía. Aquel monstruo dio un grito en el momento en que los ataques de varios de los ataques de los miembros del UBCS se centraron sobre él. Nuevamente un grito terrible por parte de la creatura quien dio una envestida en contra de los dos compañeros del UBSC que se encontraban a la izquierda de Flavia lanzándolos al suelo, después dio un golpe hacia Flavia, pero esta se agacho justo a tiempo evitando que aquella creatura le destruyera la cabeza con un golpe de la bazuca que tenía en su mano derecha.

Dando una voltereta Flavia intento alejarse del monstruo, pero este nuevamente abatió en su contra golpeando su espalda y lanzándola contra el asfalto de la carretera. Florr no pudo creer lo que veía, rápidamente dejo de disparar y corrió hacia donde se encontraba Flavia para cerciorarse de que siguiera con vida. El monstruo de gabardina negra cambio entonces de blanco y se dirigió al miembro de UBCS más próximo el comandante. Aquel hombre al ver que la abominación se aproximaba a él con paso firme pero lento saco su cuchillo de combate y corrió hacia la bestia, la creatura lanzo un golpe el comandante, pero este esquivo su ataque y al hacerlo estuvo lo suficientemente cerca como para enterrar su cuchillo en enemigo, sin embargo al intentar atravesar la gabardina de la creatura el cuchillo no se enterró, sino que solamente se resbalo sobre la superficie del traje, que estaba apenas si dañado por los ataques del equipo de UBCS.

-¡Es blindaje ligero!- Asevero furioso el comandante, pero después del ese fallido intento, el monstruo tomo la cabeza del comandante y levanto al mismo y lo utilizo como escudo contra sus atacantes, el comándate fue impactado varias veces por el fuego amigo de sus subordinados. Al percatarse de lo que pasaba los miembros del UBSC cesaron el fuego y bajaron sus armas por algunos segundos, luego de esta acción y muy consciente de cuál sería su siguiente paso, la creatura apasto el cráneo del comandante y lanzo el cuerpo sin vida hacia Florr quien intentaba levantar a Flavia. Florr fue arrojada un metro por el impacto del cuerpo del comandante que cayó sobre ella bañándola de sangre y lastimándole el hombro.

Gimiendo levemente por el dolor Florr se levanto y se quito de encima el cuerpo del comandante, sin embargo ella no estaba completamente consciente de lo que estaba pasando. Al levantarse vio el cuerpo con la cabeza aplastada y con los globos oculares del comándate salidos de sus orbitas, Florr se aterro y retrocedió arrastrándose de espaldas e intentado alejar el cadáver del comándate a patadas. Flor no podía creer lo que sucedía. Una vez que los mercenarios miembros del UBCS bajaron su guardia el monstruo de la gabardina negra levantó su bazuca y después de decir suavemente –STARS…- halo el gatillo y un misil raudo se dirigió hacia los restantes miembros de UBSC, casi en un parpadeo debido a la cercanía el misil impacto de lleno en medio de varios de los soldados y estos fueron destrozados en segundos frente a la mirada impotente de sus compañeros quieres fueron distraídos por el impacto del misil y en su mayoría sacados de guardia por la explosión, sin perder ni un segundo el monstruo se acerco a otro de los miembros restantes a quien de inmediato elimino destrozándole el cráneo golpeándolo con su bazuca, ante la batalladora fuerza de aquella bestia algunos miembros más del UBSC intentaron escapar, pero aquel monstruo no había mostrado todas sus artimañas y rápidamente atravesó el pecho de uno de los soldados de la corporación Umbrella a pesar de tener puesto un chaleco de Kevlar.

El panorama era terrible Florr ni los demás miembros del UBCS podían creer lo que sucedía. Levantándose del suelo y decididamente Florr se acerco a Flavia y colocando el brazo de esta sobre sus hombros la levanto y comenzó a arrasarla lejos de la masacre. Aquel monstruo vio a las dos mujeres intentando escapar y desvió su atención hacia ellas, dos blancos fáciles, en ese momento Campbel uno de sus compañeros, tomo una de sus granadas de mano y la lanzo a los pies de la creatura quien ni se percato de aquello, Campbel y sus compañeros se pusieron al cubierto o simplemente saltaron al piso para cubrirse de la explosión. En cuestión de segundos la granada hizo explosión, Florr y su compañera Flavia fueron arrojadas al piso por la explosión de la granada, los demás compañeros vieron como aquel monstruo seguía de pie.

Pasmados todos retrocedieron, pero rápidamente aquella creatura dio señales de debilidad, ya que su caminar se volvió más errático y difícil además de que un extraño fluido de color morado brotaba de todo su cuerpo, el monstruo dejo caer su bazuca y luego este cayo de lleno sobre el pavimento agrietado por la explosión.

Una vez que la creatura pareció haber sido reducida, todos los 15 sobrevivientes o que se quedaron a luchar se acercaron observar al monstruo caído. Confundidos no sabían qué hacer, los helicópteros ya habían partido. La pregunta que todos se hacían era que hacer de ahora en adelante, ¿seguir con la misión?

-La misión ha acabado, no podemos confiar en ninguno de ustedes nos largamos- Dijo Campbel, mientras se daba vuelta y corría lejos junto a uno de sus compañeros. Los demás tuvieron sus propias reacciones, algunos decidieron quedarse, mientras que otros estaba demasiado pasmados para siquiera pensar en qué hacer.

-¡Debemos quedarnos!- Dijo Crasia la otra capitana, es nuestro deber, debemos proteger este punto hasta mañana en la contra ofensiva.

-¡Estás loca! Si una de esas cosas que solo Dios sabe de dónde demonios ha aparecido nos ha superado por completo, ¿tú crees que podremos lidiar solamente nosotros contra dos o incluso uno más como este?- dijo otro de los soldados sobreviviente antes de darse la vuelta. –Si saben lo que es bueno deberían intentar escapar e intentar llegar de nuevo al campamento e informar de lo sucedido o simplemente escapar, es lo que yo hare, ustedes pueden hacer lo que deseen y todos los que quieran seguirme pues háganlo.- aquel hombre comenzó a correr lejos de la barricada y lo siguieron tres hombres más.

-Florr… ¿te quedaras?- Pregunto Crusia a la novata, pero Florr solamente sujeto su crucifijo y dijo insegura.

-Debemos proteger St. Michael…- Luego de eso Levanto a Flavia quien recuperaba la conciencia y comenzó a alejarse del lugar, sin embargo no perdía de vista a sus compañeros que decidieron quedarse en aquel lugar.

-Está bien… espérenos allá, nosotros resguardaremos las posiciones- Dijo Crusia, quien pensaba que si permanecían el lugar u que si al menos dos miembros permanecían en la torre del reloj de ST. Michael. Sería mejor que Escapar.

No obstante Florr no estaba segura de que hacía, ni a donde se dirigía, solo quería escapar y llevarse a Flavia consigo… Pero mientras Florr y Flavia se alejaba, el equipo tomaba posiciones sin notar que aquel monstruos comenzaba a mover levemente sus extremidades.

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